El pueblo en cuestión, en la comarca de Zhangxian, junto a la ciudad de Dingxi, está ahora separado de los conductores por un muro de dos metros de altura y cinco kilómetros de longitud (aunque tiene aberturas cada cuatro metros para permitir salir a la carretera a los vecinos).
El muro comenzó a construirse en octubre, y a los vecinos se les informó de que se trataba de un "proyecto de alivio de la pobreza", pero semanas después los habitantes comprobaron con estupor que tal proyecto consistía sólo en eso, una pared para "aliviar" la visión de los conductores.
"Creemos que el único objetivo de este muro es bloquear la vista de las feas viviendas de los campesinos", señaló un vecino de Zhangxian, mientras otro aseguró que las autoridades "les habían prometido reparar el exterior de las casas, pero sólo quieren tapar de la vista a nuestros pollos y cerdos".
Un responsable de propaganda del gobierno de la comarca fue preguntado por la prensa china sobre el polémico proyecto, y aseguró que ellos no eran responsables de ese muro y ni siquiera lo habían aprobado, señalando la posibilidad de que instancias más altas lo hubieran ordenado.
Otro responsable local consultado por el diario "South China Morning Post", cuyo nombre tampoco fue revelado, admitió en cambio que el muro era "parte de la mejora y embellecimiento de la carretera nacional 212" cuyo objetivo no era otro que el de "hacer que la vía luzca bonita".
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